La pandemia y el teletrabajo están motivando a muchas familias jóvenes y adultos mayores a dejar la capital, aprovechando la oportunidad de acceder a viviendas más amplias a un precio menor, en ciudades que atraen por su infraestructura, conectividad, tranquilidad, clima y paisaje.
Durante los últimos meses, Santiago ha experimentado el mismo fenómeno que está ocurriendo en las grandes capitales a nivel mundial producto de la pandemia: la migración de sus residentes hacia la periferia, a ciudades más pequeñas o zonas rurales, en un cambio en las preferencias que ha sido evidenciado por consultoras y corredoras tanto en Europa como Estados Unidos.
El gerente comercial de Inmobiliaria Altas Cumbres coincide que la tendencia se repite en nuestro país, trasladando la demanda hacia otras regiones, como la costa central, Coquimbo o Los Lagos. “Desde fines del año pasado detectamos un aumento del interés de los santiaguinos por proyectos en regiones, especialmente en el sector de Llanquihue, fenómeno que se manifestó de forma más evidente con la llegada del Covid-19. Esto se ha visto reflejado en nuestras ventas a clientes provenientes de Santiago, que aumentaron desde marzo de un 20% a un 40% y donde la posibilidad de teletrabajar ha sido un factor determinante a la hora de elegir una nueva residencia”, analiza Enrique Loeser.
Otro factor importante es el valor más bajo de las propiedades. “En estas regiones se pueden encontrar viviendas por el mismo precio que en Santiago, pero con espacios más amplios, que permiten enfrentar en mejores condiciones una crisis sanitaria como la actual”, explica el ejecutivo de Altas Cumbres.
De acuerdo con datos entregados por Tinsa del trimestre mayo-julio de 2020, el valor promedio de un departamento en Puerto Varas —una de las ciudades que lidera la demanda de los capitalinos— es de 80,72 UF/M2, mientras que en Las Condes es de 109,9 UF/m2 y en Providencia es de 98,48 UF/m2. “Esto quiere decir que por un departamento de 55 m2 en Puerto Varas pagas aproximadamente 4.440 UF, en Las Condes 6.044 UF y en Providencia 5.416 UF”, aclara Enrique Loeser.
Fabián García dice que otras ciudades que destacan en este sentido son Valdivia, Coquimbo y La Serena y Arica, “donde es posible encontrar viviendas con un alto valor urbanístico y paisajístico por valores bastante menores de los que encontramos en RM. Por ejemplo, en Valdivia es posible adquirir un departamento con vista al río Calle-Calle por un valor cercano a 3.500 UF, similar a un departamento en San Miguel. Misma situación de precio se da en proyectos cercanos a la línea costera en Coquimbo y en La Serena, donde los proyectos muestran valores promedio de 3.300 UF”.
Además, el experto de Tinsa destaca como un factor decisivo el hecho que —en los últimos 20 años—, muchas ciudades han sufrido cambios importantes que han ayudado a la descentralización, “como la ampliación de puertos en regiones, construcción de nuevas autopistas, nuevos equipamientos de gran escala y servicios que equiparan o sobrepasan algunas zonas de la capital”, complementa Fabián García.
Respecto al perfil del cliente, el gerente de Altas Cumbres señala que han detectado distintos tipos. “Hay un grupo que es mayor, entre los 60 y 70 años, que está pensando vivir por temporadas en regiones, por razones de salud, buscando mayor tranquilidad o clima. También vemos abuelos que compran propiedades para estar cerca de los nietos cuando los hijos se van a vivir a regiones. Ése sería el segundo grupo, conformado por matrimonios jóvenes, de profesionales entre 30 y 40 años, que tiene uno o dos hijos pequeños, que por su edad aún es fácil cambiarlos de colegio”. El ejecutivo añade que, en general, son profesionales que fueron trasladados por su trabajo a otra ciudad, o bien tienen la posibilidad de trabajar a distancia o buscan emprender en negocios asociados a la sustentabilidad y la tecnología, “sobre todo en el sur donde está generándose un pequeño polo de startups muy atractivo para los profesionales jóvenes”, cuenta Enrique Loeser
Respecto al tipo de vivienda, sostiene que las preferencias la lideran los departamentos con mayor metraje, con espacios versátiles, con grandes terrazas, vista al lago o a los volcanes. Por su parte, la gente que cotiza casas busca un patio para disfrutar un quincho, tener mascotas y zonas para que los hijos puedan jugar. “En resumen, creemos que el espacio y la calidad de vida comienza a ser un factor tan importante como la ubicación. Desde que hace cinco o seis meses, lo vemos reflejado en el incremento cada vez mayor de las consultas a través de los canales digitales para conocer y comprar en regiones, por lo que la transformación digital ha sido un tremendo facilitador de este fenómeno”, finaliza.
fuente: Sector Inmobiliario