El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) financió hace algunos años la modernización del Estado de Chile, con el fin de llevar a cabo 6 proyectos que se deberían terminar antes del 2018.
Contar con un Estado digital ha sido uno de los desafíos del último tiempo, no solo para Chile, sino para la región en general. Es debido a esto que el Banco Interamericano de Desarrollo financia una serie de programas que permiten potenciar dicha digitalización.
En el caso de nuestro país el programa de Modernización del Sector Público se compone de una serie de proyectos que son formulados por el BID y la Unidad Coordinadora del Programa (UCP) en conjunto. Actualmente se encuentran en ejecución los proyectos para Chile Atiende, con un 60% de avance, SERNAC con 61%, ChileCompra con 66%, Modernización INE que tiene avanzado 62%, Superintendencia de Seguridad Social que es el más avanzado con 67% y la Dirección del Trabajo con un avance del 51%. Estas cifras están publicadas a la fecha en la página web de Modernización del Estado parte del Ministerio de Hacienda.
Como el programa es financiando por la entidad bancaria internacional, cada proyectos debe ser aprobado por el Comité Estratégico del Programa, el cual está conformado por representantes del Ministerio de Hacienda y la Dirección de Presupuestos (DIPRES). Finalmente si el comité da su aprobación, para que el proyecto pueda iniciar es el BID quien debe entregar su no objeción, es decir, es quien toma la decisión final.
Según el especialista del BID, Edgardo Mosquera, Chile ha sido líder en temas de modernización del Estado, no solamente por haber adoptado medidas que otros países de la OCDE han implementado, sino también por ser creativo y tener herramientas que otros países de América han adaptado según su realidad. Sin embargo, el experto coincide en que deben existir mejoras y avances en temas de Gobierno Digital.
Primero, existe la necesidad de que el departamento de Gobierno Digital tenga la facultad de hacer políticas y leyes sobre este tema y de esta forma Chile Atiende, se pueda expandir a más trámites.
Por otro lado, la información que genera el Estado es infinita, estas bases de datos deberían ser compartidas entre ministerios y cruzadas para diseñar políticas públicas. A ello se le suman los datos abiertos, los cuales deberían ser “user friendly”, para que el usuario pueda hacer un real uso de este derecho. Además, todo esto puede brindar información a las empresas para captar necesidades y ofrecer nuevos servicios.
Por último, el experto agregó que el mundo se está digitalizando y si bien, existe un segmento de la población que se puede quedar atrás; el sector público y privado deben ir en esta dirección.