A pesar que el organismo anunció que la mejora a nivel mundial no está asegurada, es de esperar que el indicador se ubique en 3,7% el 2018, pero bajaría a 3,6% el 2019, siendo un factor que beneficia el crecimiento de Chile.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) proyecta que el Producto Interno Bruto sería de 2,9% para los años 2018 y 2019. El crecimiento estaría dado por mejoras en la demanda externa, política monetaria acomodativa y mayor inversión en minería.
Según el reporte entregado este martes 28 de noviembre, “el crecimiento económico se está recuperando. La confianza de las empresas y exportaciones está mejorando lentamente, impulsada por tasas de interés históricamente bajas, demanda externa más alta y precios del cobre más firmes”
“Los avances del empleo y salario se están acelerando, respaldando a los ingresos reales disponibles y el consumo privado”, el cual tendría una expansión de 2,8% el próximo año. Con respecto a las exportaciones, que disminuyeron este año, para el 2018 tendrían un crecimiento de 3,1%.
A pesar de que la OCDE insiste en que la mejora a nivel mundial no está asegurada, sí se atribuye este factor al crecimiento de Chile para los próximos años; pues el PIB mundial se ubicará en 3,7% el 2018, pero bajaría a 3,6% el 2019.
Inversión en Infraestructura es Clave
La OCDE señaló que es clave concretar las inversiones de infraestructura, de lo contrario, el desempeño podría verse afectado: “El declive de la inversión en infraestructura podría pesar sobre el crecimiento de largo plazo, si el aumento planificado en proyectos de sociedad público-privada no se materializa”.
El reporte agregó que ampliar los ingresos públicos (…) y reevaluar los impuestos sobre los recursos naturales asegurarían financiamiento más sostenible para gasto social y en infraestructura”. En política monetaria se espera que el Banco Central aumente lentamente su tasa de política desde mediado de 2018.